Saltar al contenido
Artículos publicados » Negocios familiares I

Negocios familiares I

ÁLVARO RAMÍREZ – EL CANDIL – AÑO IV – N° 185.-


En esta semana estuve apreciando algunos eventos “históricos” para dos pueblos hermanos, Colombia y Venezuela. Pueblos con los mismos orígenes, gestas compartidas e intenso intercambio que ha enriquecido su vocación de trabajo y emprendimiento, pero que hoy tienen en peligro su futuro y han desperdiciado una generación prometedora que se ha visto obligada a emigrar y a buscar oportunidades más allá de sus fronteras, todo ello producto de lo que también podríamos llamar, decisiones “históricas”, en la elección de líderes.

Uno de los eventos históricos fue la presentación y publicación final del informe de derechos humanos preparado por la comisión de la ONU, donde plasma acusaciones, con sustento en investigación objetiva y pruebas, de acciones violatorias flagrantes de derechos humanos, incluyendo asesinatos, y torturas ordenadas directamente por miembros reconocidos del gobierno venezolano incluyendo el primer mandatario. Como complemento y respuesta a la publicación del informe, en forma abierta el gobierno reaccionó con amenazas a los países que acaten y acepten como válidos los resultados y recomendaciones del informe, que entre otras cosas se hizo con la autorización de esas “autoridades”.  

Otro evento “histórico” fue la intervención del recientemente electo primer mandatario de Colombia, en la asamblea general de la ONU. En su intervención “declaró” fracasado el esfuerzo que han venido llevando a cabo diferentes países en su lucha contra las drogas ilícitas. También en su discurso invitaba y promovía la paz total a pesar de sus orígenes e incursión en la vida pública como parte de un grupo armado.

El tercer evento “histórico” y probablemente el de mayor impacto mediático promovido, fue la reapertura de la frontera entre los dos países. Frontera que ha permanecido oficialmente cerrada desde hace 7 años por decisión del gobierno venezolano que recurrió hasta a la colocación de obstáculos físicos que por sus características podían constituir una amenaza a la integridad de la estructura, con tal de evitar que pasara la frontera una también simbólica ayuda humanitaria.

Estos tres eventos recientes tienen en común algunas características:

Los actores principales, en cada caso son los mandatarios y clase política que los rodea y sustenta, y que, en ninguno de los dos países, a pesar de lo reciente de la elección de Colombia, gozan de una mayoría que les dé una real representatividad del pueblo para quien dicen trabajar.

Los tres eventos están rodeados de un SIMBOLISMO que ya se ha vuelto característico del par de gobiernos y que por tanto ya empiezan a dejar ver que son más una pretendida imagen que otra cosa. En el caso del informe de la ONU y su reacción, la pretendida imagen de fortaleza que fue utilizada como respuesta en forma de amenaza, ya no está respaldada por el “poder” que ejercía sobre países vecinos cuando la economía era boyante y la capacidad de producción y precios lo permitía. La supuesta reacción airada por la ofensa de mostrarlos culpables de flagrantes violaciones quiere asociar la vehemencia con la razón, como si ya el mundo no supiera que cualquiera puede disfrazarse de ofendido, y la vehemencia será un disfraz mientras no demuestre la inocencia ante pruebas contundentes y acusaciones formales.   

En el caso del discurso en la ONU, la invitación a los demás países del mundo a actuar bajo su dirección para solucionar el problema de las drogas, la salvación del ambiente y la paz total, (reconocidas por cualquiera como problemas vitales para la humanidad), no pasa de ser una pretendida demostración de sapiencia, capacidad y voluntad, como lo puede ser cualquier promesa de campaña refiriéndose al tema de la pobreza o el desempleo, donde se pretende tener la solución con solo enunciar el problema y el deseo de resolverlo, pero sin presentar siquiera un esbozo de plan serio para hacerlo. Ese simbolismo no pasa de ser un irrespeto a los demás países del mundo a quienes presenta, como en cualquier campaña electoral, en forma general y etérea como culpables y contrarios al deseo de solucionar los problemas por el solo hecho de tener enfoques diferentes y esperar verdaderos planes que demuestren la capacidad de cambiar y aportar una solución, no solo el deseo.  

En el caso de la apertura de la frontera. Hasta flores blancas se vieron, en una pretendida demostración de capacidad de lograr la paz, olvidándose de los mutuos aportes en contra, tanto con apoyo a actos y actores violentos como con participación activa en los mismos, por parte de quienes simbólicamente trataban con delicadeza las rosas. El rol simbólico de benefactores suministrándole magnánimamente a la población la oportunidad de trabajar y producir conjuntamente y supuestamente demostrarlo, dejando cruzar la frontera por el puente a algunos camiones, no pasa de ser el evidente reconocimiento que como supuestos lideres, hasta ahora lo que han hecho realmente es obstaculizar y destruir la labor productiva del pueblo trabajador y emprendedor, y promover con el uso de las armas y la violencia, el odio entre pueblos con trayectoria de hermandad. Es pretender ser benefactores y promotores de la prosperidad y paz entre los pueblos sabiendo que su real símbolo e inspiración son una espada y un uniforme de guerra.

Los pueblos hermanos no combaten, se integran y si una característica tiene la frontera colombo venezolana es su actividad, su vida. No necesariamente son pueblos vinculados a procesos de manufactura como principal actividad, aunque haya sus excepciones, pero si dedicados casi por entero al comercio. Por esta vía han desarrollado vínculos que van más allá y se han convertido en verdaderos lazos familiares. El intercambio comercial es el “Negocio Familiar” de los dos pueblos hermanos. Difícilmente Ud. encuentra un nativo de Cúcuta o del Táchira que no tenga familiares del otro lado de la frontera.

Además del SIMBOLISMO que pudiera tomarse alegremente por algunos comentaristas y analistas como una característica folclórica e inocua, pero que puede verse cómo realmente si tiene un fin especifico, estos mismos tres eventos y otros que están presentado en nuestros países hermanos, muestran también otras características probablemente más evidentes de intenciones no necesariamente filantrópicas y democráticas.

La INCOHERENCIA, entre la declaración y la actuación, es una de esas características evidentes de dobles discursos. ¿Ejemplos? El derecho a la manifestación de inconformidad y hasta rebelión, solo cuando se desea tomar el poder sin importar los medios, se convierte en acción inaceptable y digna del más absoluto rechazo cuando se está en el poder al que se aspiró por las armas. El tratamiento frente a la justicia no puede ser el mismo, a pesar de la venda, cuando se debe juzgar acciones condenadas por la mayoría de la población y la ley vigente, cometidas por aspirantes al poder mediante acciones delictivas como violación al derecho a la propiedad o crímenes de guerra, vs esas mismas acciones cuando se está en el poder y se aprovecha para ajustar cuentas y eliminar adversarios con el juicio. Hablar de igualdad, inclusión, oportunidades, feminismo, como medios para lograr el objetivo mientras se está aspirando al poder, y en las acciones normales y cotidianas, no simbólicas, olvidarse del discurso cuando se asigna responsabilidades. Quejarse del funcionamiento de las instituciones, de su politización y parcialización mientras se aspira al poder, y al logar obtenerlo, tratar por todos los medios de controlar esas instituciones y ponerlas al servicio de la “causa”. Quejarse de la falta de planificación, derecho a la participación, negación del debate e información al pueblo, mientras se aspira al poder para, una vez alcanzado, buscar un apoyo irrestricto de contendores políticos mediante “acuerdos”, para buscar aprobar modificaciones transcendentales para el funcionamiento de la sociedad, como la justicia, la salud, la educación, y las finanzas nacionales, sin mucho análisis, debate e información. Quejarse cuando aspiran al poder del abandono de las regiones y su violencia, y al conquistarlo, imponer cargas y supuestas soluciones a problemas creados por ellos mismos con su soberbia, mesianismo y apoyo a los violentos especialmente en la zona fronteriza.  

Podríamos extendernos en estos ejemplos que, aunque pudieran parecer generales o solo apreciaciones, son reales y se puede conocer sus especificidades y actores principales con solo leer las noticias y declaraciones de los ministros, presidentes y funcionarios de nuestros dos países.

Esas relaciones familiares de pueblos hermanos, especialmente en las fronteras se ven atacadas por la manipulación e intenciones de minorías con el poder de legislar, juzgar e imponer medidas, con el apoyo de la fuerza que se supone defiende los intereses del pueblo cumpliendo y haciendo cumplir la ley.

Los pueblos hermanos con el convencimiento que da la verdadera historia de luchas y logros conjuntos y no las narrativas apoyadas en simbolismos tendenciosos, son el bastión que sigue trabajando para lograr el progreso a pesar de los ataques y ello se aprecia cuando se visita las zonas vivas de frontera. Allí los lazos familiares y de verdadera integración se observan como si fueran una república independiente labrándose un destino, lejos de las incoherencias de falsos mesías. Esos pueblos cada día que pasa van entendiendo mejor que si los supuestos sabios conductores, estrellan el autobús, todos vamos a ser víctimas porque viajamos en él. La única salida es imponerle a los “conductores”, con esa suma del esfuerzo de pueblos hermanos, que conduzcan como debe ser para beneficio de todos quienes viajamos y los escogimos como conductores. No es fácil, impedirles su desviación, pero es mandatorio si no queremos seguir perdiendo generaciones de lado y lado de la frontera.



Álvaro Ramírez
Álvaro Ramírez

Ingeniero Industrial con entrenamiento en USA, England, Holland, UCLA, Penn State y Michigan.  Gerente de logística de bienes y servicios operaciones y proyectos en Shell de Venezuela, Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA), Petroquímica de Venezuela, S.A. (PEQUIVEN), BARIVEN, y Canadian Oíl Company de Colombia. SEO PROCURAMOS, proyectos, consultoría y asesoramiento internacional.  

UNETE AL CLUB

¡Se parte de El Candil!

Recibe actualizaciones cada domingo

¡No hacemos spam! Lee nuestra [link]política de privacidad[/link] para obtener más información.

UNETE AL CLUB

¡Se parte de El Candil!

Recibe actualizaciones cada domingo

¡No hacemos spam! Lee nuestra [link]política de privacidad[/link] para obtener más información.

Tus comentarios son valiosos para nosotros ya que nos permite entrar en comunicación con nuestros lectores

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Descubre más desde EL CANDIL

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo