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Con gríngolas

NERVIS NAVA – EL CANDIL – AÑO V – N° 224.-


Conocemos como “gríngolas” unos protectores plásticos oculares, que se le colocan a los caballos para controlar su ángulo de visión; con el objetivo de que solo miren hacia adelante durante la competición.

El término también es utilizado en sentido figurado para referirse a las personas que no quieren o evitan distraerse; alguien que tiene la mente cerrada, que no ve ni acepta nada diferente a sus propias creencias; también es una expresión de la cual puede decirse que es un “venezolanismo” que no aparece en la RAE y cuyo sinónimo es “anteojera”.


No existe indicio más cierto de estrechez espiritual, de estupidez y de arrogancia, que el permanecer apartado de quienes piensan de diferente manera que nosotros”

Walter Savage Landor


Existen personas que llegan a ser antiguas  e intransigentes en su forma de pensar, no aceptando otro pensamiento más allá que el de ellos, estacionándose en una conducta exclusivamente en lo que creen y que muchas veces pueden llegar a entender sin aceptar otros criterios, y generalmente son pensamientos de índole religioso o políticos, y aunque no sea la forma correcta de ver las cosas de igual manera están equivocados, teniendo de esa forma, una corta percepción de sí mismos, como conocedores de su propio criterio y no dan paso a otros, creyéndose que  su concepto del saber es el mejor y más acertado que el de los demás; y ante esta actitud intransigente es cuando se les dice que tal parece que van por la vida  “con gríngolas” .


“El único error, casi siempre, es creer que la posición en que estoy es la única desde la cual se divisa la verdad”

Jorge Bucay


Esta categoría de personas hasta cierto punto “engríngoladas” se podría decir que están centradas en un “foco fijo”, porque no escuchan, se mantienen encerradas en su propio criterio, dando poca o ninguna importancia al pensamiento ajeno; lo que las convierte hasta cierto punto en seres “obtusos”, aunque sin aplicar de manera literal  o peyorativo el término; porque en sentido negativo una persona obtusa, viene a ser inútil, inhábil, torpe, tonta, inepta entre otras definiciones, y más que eso, son personas un tanto tercas. 


“Las mentes cerradas no inspiran fe, valor ni convicción.”

Napoléon Hill


Así se tiene que el calificativo de “obtuso” es utilizado para referirse a aquellas personas que no son capaces de comprender cualquier cosa o situación con rapidez y facilidad; o también cuando siendo capaz de comprender se coloca unas “gríngolas”, asume una conducta necia porque no está de acuerdo con algo, haciendo pensar que lo que se le dice no lo comprende, a pesar de que su posición o idea no sea la correcta, sino más bien la equivocada. Se habla también que una persona “obtusa” cuando es de una mente cerrada a razonamientos, hablándose de que son incapaces de captar las normas, y que poseen poca habilidad  mental  pudiendo llegar a ser inflexibles.

¿A qué nos referimos al decir que una persona es de mente cerrada? Son generalmente las personas que se centran más en ser entendidas que en entender a los demás: propensas a hacer declaraciones; las que en reuniones ofrecen su opinión, pero nunca pedirán a otros que amplíen o expliquen sus ideas.

Siendo de esta manera las que evitan salirse de los parámetros sociales, de lo establecido, siendo inflexibles en sus ideas, opiniones y conceptos.

Mientras que una persona con mente abierta procede con más flexibilidad, siendo transigente con los demás, con sus idea y opiniones; no teniendo problemas en salir de su zona de confort; todo lo contrario, a una mente cerrada, encerradas en su zona.

Las personas con la mente cerrada, han llenado su cerebro con ciertos comportamientos, ideas, valores y creencias, sin permitirse la posibilidad de autoanalizarse para modificarlas; siendo en su gran mayoría, dueñas de un comportamiento errático, no porque sean los más lógicos o correctos, sino porque es  lo  más cómodo y fácil, siendo ésta una manera muy poco inteligente de vivir; ya que  al no permitirse la opción de cuestionar esa forma de pensar y actuar, se está viviendo más por defecto que por diseño. 


“La estrechez mental impide la aceptación de ideas nuevas.”

John C.  Maxwell


En su gran mayoría esas personas no son responsables de esa actitud, ya que puede ser que desde niños les fue inculcado ese comportamiento, siendo esa enseñanza poco certera; sin embargo, en su adultez tienen la oportunidad de decidir cómo ser en esa etapa de la vida.

Sin embargo, hay personas que ni siquiera están dispuestas a escuchar algo diferente, sus mentes están negadas, y simplemente rechazan todo lo que está más allá de lo que han aprendido, y eso se convierte en una gran barrera para su desarrollo personal.

Las mentes cerradas en su mayoría tienen algo en común y es que no pueden mantener la boca cerrada; porque se mantienen a la defensiva defendiendo “su posición” la cual es vacía de todo argumento, y al escucharlos con atención se puede observar que, en caso de darlos, los mismos carecen de solidez e inteligencia, porque simplemente creen tener la razón, y generalmente siempre tendrán una frase como…!así es y punto! Y si se les repregunta, dirán ¡porque si!, lo que es obvio es el hecho de que nunca se han sentado a analizar el por qué dicen lo que dicen; y no son otra cosa que repetidoras de todo lo que alguna vez escucharon.

Para poder ser personas con mentes abiertas y amplias, se debe estar conscientes de que vivimos en un mundo cambiante, y mantenernos receptivos a los consejos para de esa manera generar cambios constructivos; porque las personas exitosas siempre han tenido mentes educables e inquietas por el aprendizaje, mientras que las mentes cerradas son necias e infértiles; siendo que ese tipo de soberbia las coloca en el camino de la mediocridad.  

Algo importante es alejarse de malos patrones de comportamiento, y ser capaz de atreverse al autoanálisis, para realizar los cambios necesarios, porque de nada sirve saber lo que está mal, sino se hace nada al respecto para mejorar, porque el beneficio es para sí mismo.  


“Solo es grande en la Vida, quien sabe ser pequeño”

José Angel  Buesa  


Como corolario de este tema se puede agregar el hecho de que, para una sana convivencia, lo más sano es la integración de ideas, y que actitudes soberbias y prepotentes, mantener una actitud como quien lleva constantemente unas “gríngolas” y el centro del universo soy YO, es lo más lejos de la verdad, porque el universo es infinito, y siempre será más conveniente optar por una actitud más humilde, aceptando que otros criterios u otras ideas, pueden hacernos más   felices.

Es así como tenemos que siendo la humildad uno de los valores más complicados de definir, también se considera una de las piezas centrales del liderazgo; ya que se distinguen dos tipos de humildad, la humildad agradecida y la humildad autodestructiva; la primera se relaciona con el éxito personal, que se conecta con el prestigio; y la segunda lo hace con el fracaso e implica autoevaluaciones negativas, donde las personas siempre van con unas “gríngolas” puestas, sin mirar a ningún otro lado que no sea a sí mismas.

¡Hasta una nueva oportunidad!.

Especial agradecimiento a mi amiga Lic. María Judith Ron por su orientación en este tema.


“La humildad siempre abrirá más puertas, de las que jamás abrirá la arrogancia”

ZIg Zaglar



Nervis Nava

Escritora especializada en investigación y divulgación de temas asociados al desarrollo personal, de autoayuda, virtudes y valores humanos positivos. Venezolana, del estado Zulia, defensora de la libertad, la república, la propiedad privada y el estado de derecho.  



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1 comentario en «Con gríngolas»

  1. Excelente planteamiento. Mente cerrada es el común denominador del fanatismo, en cualquier área, propiciando incluso abusos como resultado de la intolerancia.
    Gracias por la deferencia.

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